jueves, 3 de noviembre de 2011

Novedades en Bonsai-do

Hola Amigos

Hace bastante tiempo que no le dedico algo de tiempo a mi blog!
Muchas veces, cuando me contacta alguien del mundo del bonsái, pregunta: "como va el olmo del blog?" Y como una imagen vale más que unas cuantas palabras.....
Si quieres ver la 10ma parte del artículo Preparación de un árbol de hoja caduca, haz
click aquí.

Casi se me olvidaba. La foto que encabeza este artículo es la imagen actual del buxus protagonista de mi artículo El buxus complicado, con su nuevo frente (el dorso anterior). Accede al mismo haciendo click aquí.

Un abrazo

Martín

lunes, 5 de julio de 2010

Viejas novedades en Bonsai-Do

Hola amigos!
Les he preparado la 9na parte del artículo preparación de un árbol de hoja caduca, serie de artículos que ustedes han valorado mucho.
Todos nosotros tenemos ganas de disfrutar de un buen bonsái, y nos cuesta entender que a veces comenzar desde cero, es la mejor y más rápida manera de hacer las cosas. Esta serie comenzó con esta idea, la de animarlos a probar una manera diferente de trabajar!
Pueden acceder desde la sección Técnicas o haciendo click aquí.

P.D. He actualizado, con un par de fotos nuevas, el artículo Los tres palos... Accede haciendo click aquí. (que opinas? lindo palo, no?)
Un abrazo y nos vemos pronto.
Martín

lunes, 10 de septiembre de 2007

COMENTARIOS GENERALES

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domingo, 9 de septiembre de 2007

Maestros de Bonsai?

Hace días, o semanas, o quizás meses, que una idea anda dando vueltas en mi cabeza. Como en cualquier otra empresa en la que el ser humano se embarca, el bonsái tiene sus facetas, y cada aficionado o profesional, su preferencia por una de ellas. Yo soy un enamorado de la difusión del bonsái, de la enseñanza, y es por esto que armé este blog, para compartir, no para “demostrar” ni menospreciar el trabajo ajeno, sino para mostrar mi manera de trabajar, y de sentir el bonsái, en resumen: MI EXPERIENCIA.
Soy habitué de varios foros, y es gracias a ellos que muchas personas de diferentes geografías pueden conectarse e intercambiar opiniones. Muchos son los que se benefician de este intercambio. Pero no todo lo que reluce es oro!!! Muchos olvidan que el bonsái es un “verbo”, una “acción”.
Conozco a muchas personas que HABLAN de bonsái, pero que no pueden demostrar sus conocimientos de la manera en que estos deben ser demostrados: con sus plantas, sus bonsái, sus obras. Esto, que parece tan simple, suele ser el común denominador en el bonsái argentino. Muchos opinan, debaten, discuten, CRITICAN, pero nunca muestran una obra de su autoría...... Gensho Uema, un Maestro de Bonsái de la Ciudad de Córdoba, llama a esta gente "opinadores del bonsái". Alejandro Sartori, otro Maestro de Bonsái, de la Ciudad de Buenos Aires, dice que el D.N.I. (Documento Nacional de Identidad) de un bonsaista son sus plantas. Pues bien, yo creo que es así!!! Cuantos seudo-maestros hablan de bonsái pero nunca muestran UN bonsái!!!
Lamentablemente, la informática, los mail, los foros, son herramientas que esta gente utiliza para mostrar una imagen de lo que no son, para engañar, utilizando solo palabras. Como si hablando solamente se construye un bonsái!!!El bonsái solo puede aprenderse a través de la repetición continua de las técnicas aprendidas (TRABAJANDO), luego, cuando hemos incorporado las mismas y no necesitamos "pensar" en ellas, es cuando nace el arte, la creatividad. Cuanta gente habla del bonsái natural!! La mayoría de estos seudo-maestros lo hace...... Pero existe un bonsái natural? Si el bonsái es un arte, y en cualquier arte interviene la mano del hombre, entonces no podemos hablar de bonsái natural. Creo que esta es una excusa para no hacer lo que NO SE SABE HACER.
Si nuestro arte solo se limita a mantener plantas en maceta, sin ninguna técnica o intención aplicada, porque hablamos del ARTE del BONSAI? No seriamos solamente meros cultivadores?

Este es solo un pensamiento en voz alta, hecho entre amigos…..

Que opinan ustedes?

sábado, 26 de mayo de 2007

Bonsai, en contra de la naturaleza?

El arte del bonsái es uno de los mas controvertidos, están los que aman a la naturaleza y ven en ellos toda la grandeza del mundo vegetal, por otro lado están los detractores, los que consideran al bonsái como algo artificial, algo antinatural, e incluso comparan a los árboles con las niñas chinas a las que les dejan pequeños zapatos para que no crezcan sus pies, mientras que muchos son los que dudan y se preguntan ¿No es quitarle la libertad? ¿No sufre? ¿No es una tortura?.
Detengámonos un momento y reflexionemos: ¿Por qué un espinillo de 20 años de edad alcanza los 6 metros aproximadamente en tierra fértil y con un clima benigno como el de Buenos Aires, mientras que otro de la misma edad, creciendo en una grieta en las sierras cordobesas, no supera el metro? Los arboles, a diferencia de los animales, se adaptan al medio en que viven y no por esto unos sufren mas que otros.
Las leñosas de una misma especie llevan en sus genes mas o menos los mismos parámetros de crecimiento: altura, forma característica de desarrollo, tamaño de sus hojas, etc. Pero todos estos parámetros se modifican en base al medio en el que crecen, al clima y a otros muchos factores externos. Es gracias a esta capacidad de adaptación que podemos cultivar árboles en macetas pequeñas, simplemente se adaptan al espacio reducido de una bandeja.
Yendo un poco mas lejos y si observamos a los árboles en la naturaleza, veremos que ellos nos cuentan su historia, historias de viento, tormentas, sequías, incendios o de calma y bonanza. Estas historias son el alma del árbol y es lo que nosotros, los que hacemos bonsái, debemos buscar en nuestras plantas.
Nosotros no vamos en contra de la naturaleza, ella hace el trabajo, nosotros solo lo dirigimos.


"El bonsái nace del deseo de llevarnos a casa una pequeña parte de la naturaleza, de traer al seno de nuestro hogar la paz y respeto que emanan los viejos árboles."

Martín Erculiani

El alma de un árbol, cuestión de carácter

Cuando observamos árboles en la naturaleza, seguramente nos llaman la atención aquellos que por sus características especiales se destacan por sobre sus hermanos. Puede que esta característica diferenciadora sea la forma de su tronco, cicatrices de heridas producidas por las inclemencias del tiempo, su edad o simplemente el aura que irradian.
Esto es el alma del árbol, su carácter, y es lo que nosotros, los que hacemos bonsái, debemos imitar en nuestra obra.
Si observamos detenidamente estos ejemplares "especiales", notaremos coherencia en todas sus partes, algo que no siempre somos capaces de proyectar en nuestro trabajo. La copa, el trono y sus raíces forman parte de un conjunto armónico.
Muchas veces vemos bonsái incoherentes, con troncos retorcidos, mucha madera seca y copas frondosas, con sus ramas y masas de verde tan mimadas que parecen ser la fusión de dos árboles. Esto es, en la mayoría de los casos, el resultado de una incorrecta aplicación de técnicas de envejecimiento artificial o el de utilizar árboles recolectados (yamadori) y modelarlos como se de una planta de vivero se tratara. Si algún tipo de inclemencia imprimió una forma retorcida al tronco, también lo hizo con sus ramas. La naturaleza no obra de manera selectiva y solamente en una parte del árbol, lo modifica en su conjunto.
Con esta idea en mente, debemos reflexionar sobre nuestras propias creaciones ¿Son mis plantas coherentes?, ¿cuentan una historia?, ¿tienen carácter?.
No quiero ser malinterpretado, no digo que todos nuestros bonsái deban mostrar un aspecto de sobreviviente, también pueden emanar un carácter dulce y suave, como el de los árboles creciendo en un valle al abrigo de las montañas. Lo que sugiero es una aproximación más racional, más coherente en el diseño y modelado de nuestros bonsái.
La técnica nos permite realizar casi cualquier cosa, como un sauce en estilo vertical formal, pero esto no es la esencia de nuestro arte. Imitemos a la naturaleza no doblegando nuestros árboles, solo guiémoslos con suavidad, mostrando su carácter, su alma.


Martín Erculiani

Bonsai, una opinión personal

La definición de "bonsái" no es una tarea sencilla. En la literatura especializada podemos encontrar lo siguiente: palabra de origen japonés, cuya traducción literal es árbol en maceta. Pero esto solo no basta para explicarlo. Según pude observar, bonsai tiene un significado muy distinto para un sinnúmero de personas.
Unos lo consideran como un pasatiempo cercano a la jardinería, y tienen razón. Se preocupan por el cultivo. Su entusiasmo pasa por poseer una variada colección de distintas especies y su mayor reto es conservar saludables distintos tipos de árboles, que cuanto más exóticos mejor. Esta clase de "bonsaistas" se preocupa mas por la variedad que por la calidad.
Hay otros que ven el bonsai como una forma de arte, y también tienen razón. Encuentran en el material vegetal un excelente medio a través del cual expresarse. Ven en el árbol sin trabajar lo mismo que un pintor frente a un lienzo en blanco o un escultor frente a un bloque de piedra. Para ellos no es la variedad lo importante, sino la forma, el volumen, el balance, etc. Creen que es mejor poseer 100 árboles de la misma especie y trabajados artísticamente que 100 variedades distintas y exóticas. Consideran que el bonsai no es sinónimo de coleccionismo. Son artistas, pero no por ello descuidan el cultivo, ya que su obra nunca concluye y el árbol debe rebozar de salud. Creo que esta clase de "bonsaistas" es mas completa, ya que sabe ver la obra de arte en la naturaleza y expresarla.
Pero también hay una ultima clase, menos frecuente que los anteriores, pero son los que dejan huella. Ellos ven en el bonsai un camino, una forma de vida. Para ellos, los arboles en maceta son una expresión de la eternidad, del cambio, de la evolución, representan la unión del hombre con lo divino. No luchan contra la naturaleza, la imitan. En un pequeño árbol ven la grandeza del cosmos. Se consideran observadores, ven pasar las estaciones y por ende el cambio que se produce en sus pequeños-grandes arboles y aprenden. Ven en el invierno, la fortaleza de sus bonsai desnudos soportando el duro frío y aprenden. Ven que al llegar el calor, estos arboles cobran vida nuevamente y aprenden, y así viven y comprenden los ciclos de la naturaleza y de la vida. Para esta clase de "BONSAISTAS" no es fácil explicar que significa BONSAI, ya que es imposible expresarlo con palabras, para ellos es algo que se siente en el espíritu, es algo que trasciende al hombre.
Pienso que este ultimo es el fin que perseguimos, consciente o inconscientemente, todos los que hacemos bonsai. Podemos comenzar el camino con el cultivo o con el arte, pero la meta final siempre será la misma: la unión del hombre con la Naturaleza, con lo divino.
Martín Erculiani

"La demostración no es lo importante, el alambrado no es lo primero, el cuidado cotidiano es lo que da valor" "no meter mano demasiado, no forzar, dejar hacer a la naturaleza, esperar y amar"
Sr. Hamano
(vivero Toju-en)

"El bonsái se construye quitando, simplificando. Hay que dejar tan solo la esencia de lo que queremos mostrar. El bonsái es esencia" "Bonsai es amar a los arboles. Si no amas a tu árbol, tu árbol morirá"
Sr. Kunio Kobayashi
(museo de bonsái Shunka-en)